A través de nuestra Comisión de Economía Circular hemos organizado la jornada "De la Obligación a la Oportunidad: cómo las empresas líderes están afrontando los desafíos ESG", un encuentro celebrado el pasado 3 de diciembre en la Fundación Caja Rural del Sur. Reunimos a expertos y directivos para analizar cómo la sostenibilidad ha pasado de ser un mero cumplimiento normativo a convertirse en el eje central de la estrategia empresarial y la competitividad.
La conclusión fue clara: la sostenibilidad ha llegado para quedarse, y las empresas del sur de España que la integren en su modelo de negocio están mejor posicionadas para el futuro.
El encuentro se inauguró con una ponencia magistral sobre la evolución de la sostenibilidad en 2025 y las perspectivas para 2026, a cargo de Antonio Jesús Escalante, responsable de Desarrollo de Negocio de Sostenibilidad y Buen Gobierno de KPMG, y Abilio Caetano, director de Innovación y Desarrollo de Negocio de Ecoterrae.
Escalante puso el foco en el creciente marco regulatorio europeo (CSRD, Taxonomía, CSDDD), subrayando que la sostenibilidad ya no es voluntaria. Aunque reconoció la incertidumbre que generan los constantes ajustes normativos, aseguró que la clave está en mantener una visión estratégica y establecer objetivos de sostenibilidad claros e integrados con el modelo de negocio, independientemente de las obligaciones regulatorias. Tal y como explicó, las compañías que optan por una estrategia de "esperar y ver" corren riesgos de perder competitividad y afectar a su reputación, y nos recordó que más del 90% de las mayores empresas españolas ya tienen objetivos de sostenibilidad, aunque solo un 65% cuenta con un plan formal para alcanzarlos. “Tener objetivos sin una hoja de ruta clara puede dejar a las organizaciones en un terreno vulnerable”, señaló, recalcando que “las empresas que integren la sostenibilidad en su visión estratégica no solo estarán preparadas para cumplir con futuras normativas, sino que también podrán transformar la incertidumbre en una ventaja competitiva”.
Por su parte, Abilio Caetano se refirió a la nueva Directiva de Diligencia Debida (CSDDD). Tal y como detalló, aunque los umbrales de aplicación directa se han elevado, la exigencia se traslada a las grandes corporaciones, que a su vez demandarán datos verificables de sus proveedores. En este sentido, Caetano aseguró que un reporte ESG bien auditado y alineado con la Taxonomía UE se convierte en un activo financiero clave para acceder a mejor financiación y mejorar el rating de la empresa.
A continuación, tuvo lugar una mesa redonda moderada por Alberto Pascual, socio director de IMP Consultores, quien recalcó que "ser sostenibles no es una elección, es la única alternativa y una oportunidad que hay que aprovechar". En esta mesa, contamos con el testimonio y la experiencia de empresas líderes en sus sectores, que ya han transformado la obligación en una ventaja competitiva.
De esta forma, Emilia Trujillo, directora de Sostenibilidad de ITURRI, nos ofreció una perspectiva realista: "La evolución de la Sostenibilidad es como una gráfica con dientes de sierra, con picos y valles... pero ya es una línea con una pendiente ascendente imparable". Insistió en que estamos en un punto de aprendizaje y corrección en esta "revolución imparable”.
Por su parte, Aécio Dantas, director de Sostenibilidad de SILBON, nos explicó cómo la sostenibilidad es una palanca estratégica que genera valor real. Mencionó proyectos tangibles como la optimización energética en tiendas y almacenes, la iniciativa de restauración ambiental "Bosque Silbon" y su proyecto de circularidad "Second Life", que da una segunda vida a las prendas. También destacó el papel de la Fundación SILBON para conectar el propósito con el impacto social local, y apuntó la necesidad de avanzar hacia un liderazgo más humano, donde la sostenibilidad forme parte de la cultura y de las decisiones diarias, no solo de los informes.
Guillermo Sánchez, director de Sostenibilidad de Grupo AZVI, nos demostró que para un grupo familiar, centenario e internacional, la sostenibilidad no es algo nuevo: "El compromiso con la protección y el respeto del medio ambiente está en nuestro modelo de negocio desde hace más de 25 años". Destacó los beneficios tangibles: reducir costes, minimizar riesgos, fomentar la innovación y mejorar las condiciones de financiación.
En el debate, en el que también participó Nicolás Tejada, director de Sostenibilidad y Medio Ambiente de ACESUR, los ponentes coincidieron en que la sostenibilidad es un factor de competitividad en el mercado global, y que las exigencias europeas, aunque complejas, no deben afectar la competitividad si se abordan desde una perspectiva estratégica e innovadora. De igual forma, destacaron que la cadena de suministro ya está activada, y que tanto proveedores como clientes son cada vez más conscientes de los aspectos ESG, lo que impulsa la necesidad de innovación y digitalización en todas las áreas.
La jornada se clausuró con la intervención de Sergio Arjona, viceconsejero de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.