Antonio Fernández ha sido nombrado nuevo delegado institucional en Andalucía de Iberdrola, empresa asociada a CESUR. Fernández sustituye así en el cargo a Alfonso Calderón, que desde 2018 compaginaba ese puesto con el de director comercial de la compañía a nivel nacional. El grupo electrico refuerza así su presencia en la región andaluza considerándola clave para el desarrollo de su estrategia de negocio, que se basa en la promoción de nuevos proyectos renovables y el impulso a nuevos modelos de consumo eléctrico, así como a la movilidad sostenible y el autoconsumo.

Antonio Fernández ha desarrollado buena parte de su trayectoria profesional en Vodafone, tanto en Andalucía como en la zona sur, donde ha ejercido los cargos de director territorial, director de operaciones, manager de proyectos top y manager de grandes cuentas. Licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad de Málaga, Fernández es MBA por el Instituto Internacional San Telmo.

Iberdrola es el primer productor eólico en Andalucía, con una capacidad instalada de 857 megavatios (MW), en proyectos distribuidos por las provincias de Huelva, Granada, Cádiz, Málaga, Almería y Sevilla. Además, es el primer productor de energía eólica en España, con una potencia instalada de 5.793 MW, y gestiona una capacidad instalada renovable total de 16.027 MW. A lo que se suma un ambicioso plan inversor en renovables, que le permitirá la instalación de 3.000 nuevos megavatios en el país hasta 2022. Esta estrategia contempla el desarrollo de nuevos proyectos en Andalucía. De hecho, la compañía prevé próximamente el inicio de la construcción de la planta fotovoltaica Andévalo (50 MW), en la provincia de Huelva. Un proyecto que suministrará electricidad verde a las cuatro fábricas de Heineken España y sus oficinas. El proyecto se construirá dentro del mayor complejo eólico de Europa Continental, El Andévalo, promovido y gestionado por Iberdrola desde 2010.

Iberdrola, que cuenta con una red comercial en Andalucía de más de 600 personas y 50 puntos de atención al cliente, ha apostado por responder a nuevos modelos de consumo con soluciones personalizadas y digitalizadas en el ámbito del hogar, la movilidad eléctrica y el autoconsumo.

El impacto socioeconómico de la actividad de Iberdrola en Andalucía en 2018 se elevó a 615 millones de euros, reforzando así su papel como uno de los principales motores de esta comunidad autónoma, en la que, durante el pasado ejercicio, realizó pagos por valor de 150 millones de euros a más de 250 empresas andaluzas

Fuente: Europa Press